Los recursos naturales son
aquellos bienes y servicios que se encuentran en la naturaleza, que surgen sin
intervención del ser humano. Se dividen en renovables y no renovables. Los
recursos naturales no renovables son aquellos que no se regeneran o que tardan
millones de años en producirse, motivo por el cual su disponibilidad es
limitada, por ejemplo: minerales, petróleo, carbón. Los recursos naturales
renovables son aquellos que son capaces de regenerarse en periodos de tiempo
más bien reducidos, como los bosques, animales, agua, aire y distintos tipos de
energía: solar, eólica, hidráulica, etc.
Desde que la humanidad por primera
vez observó la Tierra vista desde el espacio, en una foto tomada por el Apolo 8
en el año 1968, cambió definitivamente el paradigma que hasta esa fecha sobre
los recursos naturales había imperado. Desde el siglo XV venían registrándose
numerosos descubrimientos geográficos en el planeta y aún en el siglo pasado
quedaban amplios territorios sin explorar. Ver la tierra suspendida en medio de
la profundidad del espacio permitió darse cuenta que todo tenía límite y, por
lo tanto, que debíamos cuidar el planeta para evitar que debido a un uso
irracional de sus recursos éstos se agotaran.
Los recursos naturales se han ido
ampliando a través de la historia de la humanidad junto con el surgimiento de
necesidades cada vez más complejas. La clasificación actual de los recursos
naturales es la suma de todos los recursos que el ser humano ha utilizado a
través de las distintas épocas, partiendo por los alimentos silvestres y la
fauna utilizada por el hombre primitivo, pasando por el uso de distintos
metales, las distintas fuentes de energía, hasta llegar a la época actual. Es
preciso señalar que debido a un mal manejo (administración de ecosistemas)
muchos recursos naturales se encuentra contaminados o al borde del agotamiento
por sobre explotación.
En la medida que la humanidad se desarrolla también son mayores los usos que se dan a los recursos naturales, ya sea a través de la identificación de nuevos usos a recursos naturales con algún grado de aprovechamiento o de identificar formas de aprovechar elementos que hasta el momento no eran considerados recursos naturales. A modo de ejemplo señalar el hidrógeno para ser utilizado como combustible el que es extraído mediante hidrólisis u otro proceso desde el agua; también se puede mencionar la energía undimotriz que es energía eléctrica generada por el movimiento de las olas del mar. Esta evolución obliga a la docencia en recursos naturales a una permanente actualización.
Vivimos en una época caracterizada por la dependencia del petróleo, carbón y gas natural para obtener energía y combustible, situación que se hace cada vez más incierta ya que son numerosas las fuentes de información que señalan que la producción de petróleo en el mundo está declinando: cada vez son menores los hallazgos de nuevos yacimientos y es más difícil su extracción y refinación. Este diagnóstico lleva a un punto en común con los esfuerzos que se hacen para paliar las causas y efectos del cambio climático, lo que se traduce en un fomento de las energías renovables y de la eficiencia energética.
El estudio de los recursos naturales permite también identificar y conocer los riesgos asociados a su manejo y utilización. La actividad humana centrada en el aprovechamiento, industrialización y uso de los recursos naturales afecta el medio ambiente, genera contaminantes, desechos y residuos, que deben ser analizados desde el prisma de la prevención de riesgos y medio ambiente, evitando así accidentes, pérdidas, enfermedades y daños de distinto tipo.
Cátedra: Recursos Naturales.
Docente: Santiago JM Del Pozo Donoso
No hay comentarios.:
Publicar un comentario